
Sala 3: de Roma al Convento de la Peñuela
Parece ser que hacia el siglo II y a lo largo del Bajo Imperio Romano, debió ir disminuyendo o cesando la actividad minera, ocasionando el abandono y la ruina del poblado y fundición metalúrgica establecida bajo La Carolina. El mundo visigodo no mantuvo aquel poblado y apenas hay testimonios constatados de ocupación estable. Es muy probable que se despoblase esta zona, manteniéndose cierta población dispersa en cortijos, casas de campo y ventas.
Se entró así en la Edad Media, con pocos datos hasta que las luchas internas que van a disgregar el Califato de Córdoba en los reinos de Taifas a partir del 1031, junto al aumento de la presión de los reinos cristianos en su propósito de reconquista, obligan a construir y levantar una línea de fortalezas defensivas a lo largo de Sierra Morena.